HANS HOFMANN (1880-1966)







Procedencia
Galería Andre Emmerich, Nueva YorkPropiedad de Hans Hofmann
Ameringer & Yohe Fine Art, Nueva York
Colección privada, Nueva Jersey
Exposición
Nueva York, Nueva York, Betty Parsons Gallery, Hans Hofmann: Obras recientes, 24 de marzo - 12 de abril de 1947, como Phoenix IIISaint Paul, Minnesota, Minnesota State Fair, como Phoenix III, 1947
París, Galerie Maeght, Hans Hofmann, Peintures, 7 de enero - 9 de febrero de 1949
Nueva York, Nueva York, Andre Emmerich Gallery, Hans Hofmann: The Post-War Years: 1945-1949, 12 de enero - 18 de febrero de 1989
Nueva York...Más....rk, Nueva York, Ameringer Yohe, Hans Hofmann: The Unabashed Unconscious; Reflections on Hofmann and Surrealism, 30 de marzo - 29 de abril de 2006
Literatura
Galería Andre Emmerich, Hans Hofmann: The Post-War Years: 1945-1949, Nueva York, 1989, pl. 5 (ilustrada en color)Jed Perl, Hans Hofmann, el inconsciente desvergonzado: Reflexiones sobre Hofmann y el surrealismo, Nueva York, 2006, p. 36 (ilustrado en color)
Suzi Villiger, Hans Hofmann: catálogo razonado de pinturas, volumen II, Surrey, 2014, HH cat. nº 1137-1947, p. 392 (ilustrado en color)
...MENOS....
Pintado a los 65 años, Baal también muestra la voluntad de Hofmann de revisar disciplinas anteriores al tiempo que aborda los retos de la abstracción de mediados de siglo. Su vibrante paleta y el audaz uso de colores complementarios, en particular la yuxtaposición de rojo y verde, acentúan el dinamismo del cuadro. Su pincelada musculosa también refleja su experimentación de toda la vida con la tensión entre forma y libertad; las líneas ondulantes y las formas biomórficas evocan la influencia surrealista de Miró y la resonancia espiritual de las abstracciones gestuales de Kandinsky. Al igual que estos predecesores, Hofmann trató de traducir la "necesidad interior" en expresión visual, guiado por su fértil imaginación. Sin embargo, los elementos planos y las formas curvilíneas de Baal también reflejan la influencia de la pintura de improvisación, sello distintivo del expresionismo abstracto practicado por contemporáneos como Arshile Gorky, entre otros. Es una composición rebosante de movimiento y energía, que sugiere un cosmos en flujo, caótico pero deliberado.
Expuesta ese mismo año en la Betty Parsons Gallery de Nueva York, Baal señala la evolución de Hofmann como maestro e innovador. Con su vivo dinamismo y su título simbólico, el cuadro personifica la capacidad de Hofmann para infundir a la abstracción un poder elemental, creando una exploración profundamente personal de la forma y el color.